Verse envuelto en un proceso de reclamaciones con cualquier compañía puede resultar un proceso lento y tedioso. En el caso de las compañías energéticas puede serlo aún más, dado a su alta dificultad para comprender cómo funciona el mercado, y mucho más tras la liberalización del mismo.
Reclamaciones más frecuentes en el sector energético
El mercado energético se encuentra dividido en dos desde el momento en que se produjo la liberalización del mismo. Esto provoca que en el mercado regulado existan comercializadoras de luz y gas encargadas de gestionar la venta del suministro a los clientes. Sin embargo, este funcionamiento es complicado para muchos usuarios, pues aunque las empresas distribuidoras operan en zonas establecidas, las compañías de luz pueden hacerlo en cualquiera, independientemente de si operan en Valencia o en Madrid, por ejemplo.
Con todo ello, existen reclamaciones dentro del sector energético a las que el servicio de atención al cliente de cada una de estas compañías ha de hacer frente de forma diaria y regular. Son las siguientes:
- Problemas con la facturación y el cobro
- Errores en la contratación de servicios
- Pérdida de calidad en el suministro
- Precios o tarifas diferentes a los ofrecidos
- Cambio de comercializadora
- Cortes por impago
¿Cómo gestionar una reclamación con Viesgo?
Para poder gestionar un proceso de reclamación, queja o sugerencia con la compañía Viesgo, éste puede hacerse a través de varias vías. Independientemente de si la comercializadora de referencia se encuentra en Barcelona o se encarga de la luz en País Vasco, será la encargada de gestionar la incidencia con su cliente. Ésta es la primera vía, a través del servicio oficial de atención al cliente. Es la forma más común y normalmente la más efectiva, aunque no garantiza resultados.
El cliente debe tener en cuenta que todas las conversaciones quedarán registradas, y éstas pueden realizarse por teléfono, por correo, presencialmente o a través de la página web, donde es necesario seleccionar el tipo de reclamación que el cliente desea gestionar.
Una vez realizada, los operadores o encargados de reclamación, deberán facilitar al usuario un número de referencia que sirve para reclamaciones futuras y agilizar el proceso.
De no hacer la reclamación por vía oficial, se puedo optar por plataformas como la Organización de Consumo (OCU) o servicios de ayuda legal por si su reclamación no quedase solucionada en el plazo estipulado de un mes y hubiera que recurrir a instancias superiores.